Manuel Delgado Milán
Colectivo Prometeo / FCSM
La
muerte de Nelson Mandela nos pone ante nosotros la fuerza de la
determinación, la inteligencia y la generosidad que puede llegar a
anidar en un ser humano.
Hoy
es un día para la esperanza en las posibilidades del ser humano.
Mandela nos ha demostrado que cuando vemos con certeza que el objetivo
está a nuestro
alcance, que la libertad, la justicia y la unión pacífica de la
Humanidad es nuestro destino, el camino puede ser muy duro y largo pero
las dificultades nos harán crecer. Aumentará la fuerza y se
desarrollarán en cada uno todas sus potencialidades, esas que
desconocemos que tenemos hasta que la vida nos las exige.
Mandela descansa hoy en los corazones de las mujeres y los hombres de
bien como una semilla de lo mejor que podemos llegar a ser.
Hoy
pareciera que ninguna idea lo hubiese encarcelado, que nunca se discutió
su grandeza, que sólo tuvo amigos y admiradores. Es el paso previo a
que se convierta en otro producto de consumo, en un santo inalcanzable
para el resto de los mortales, para que su ejemplo sea inofensivo.
La realidad es muy distinta. Todos tenemos por descubrir un Mandela en
nuestro interior. Son sus carceleros y son los represores los que nos
abren el camino para demostrar la medida de nuestra fuerza si no
contemplamos nada más que la certeza de la victoria. Descubriremos de lo
que somos capaces individual y colectivamente en la misma medida en nos
pongan obstáculos para lograrlo.
Vamos a tener la suerte de ver a muchos "Mandelas" en los tiempos que
corren. De hecho anoche presenté en un acto a uno al que nunca le darán
el Nobel, ni falta que le hace.
Hay muchos, muchísimos, millones de
mandelas y los tenemos a nuestro lado sin valorarlos porque nos
interpelan. Pero si miramos con más atención descubrimos que cada uno
tiene uno dentro luchando por salir.
Hasta que no lo consigamos, no lograremos la paz y la verdadera alegría
que trasluce la sonrisa de Mandela. La lucha es la unica manera de poder
descansar, como descansó Mandela sabiendo siempre que luchaba para
vencer y que resignarse es un infierno insoportable.
Hace un tiempo que otro ilustre personaje Kenedy jefe de la Cia mando asesinar a Culumba y al mismo tiempo encarcelar Mandela con el apoyo de toda la tropa de jefes de estado occidentales.
ResponderEliminar¿Qué hicieron por él?
¿Qué derecho tienen a ir a Sudafrica a su funeral a derramar lágrimas de cocodrilo?
" De hecho, anoche, en acto público, presenté a alguien que jamás recibirá el Nobel ..."
ResponderEliminarPerdón por el atrevimiento pero sería menos "engorroso" el párrafo.