José Antonio Naz Valverde
Colectivo Prometeo y FCSM.
En el segundo mes después de las elecciones seguimos en un mar de dudas sobre los posibles
pactos de Gobierno para los próximos años en nuestro país. Si descartamos la repetición
de elecciones, que no desea casi nadie, hay dos grandes opciones en el
ambiente: "la gran coalición" (PP-PSOE- ¿CIUDADANOS?), que
garantizaría la "estabilidad"; o el "pacto de izquierdas"
(PSOE-PODEMOS-IU), con algún otro apoyo, que sería "el
cambio" demandado por una mayoría de las personas
que votaron. Pretendo hacer una pequeña
reflexión sobre ambas opciones en base a los discursos y la experiencia
constatada.
En el discurso, la
Gran Coalición es la
"recomendada por los mercados", garantizaría "la continuidad" sin sobresaltos, nos mantiene entre
los países del
"euro"... Constatando con la experiencia y los hechos supondría continuar con las regulaciones
laborales, las reducciones y recortes de servicios públicos, las rebajas salariales, el aumento de la deuda... Pero nos
dicen que es la medicina necesaria para que dentro de poco podamos salir del
agujero. Los partidos deben tener "visión de Estado" para enfrentar estas dificultades en lo económico, pero sobre todo en la defensa de
"la unidad de la Patria", quizás el argumento más importante para
no dejar que gobierne o tenga influencia esa izquierda que "pretende
destruir España"; aunque los
hechos nos dicen que ha sido con el gobierno de Rajoy cuando más separatistas han aparecido, y que ellos
mismos acaban de facilitarles los grupos parlamentarios, mientras que Podemos e
IU han declarado siempre su opción por el Estado Español, con todas las nacionalidades que lo integran.
Por el otro lado
está la ilusión de la izquierda, cuyo discurso viene a
decir:
1- PSOE y PODEMOS
tienen programas parecidos. Se olvida que el primero ha tenido programas
similares en otras ocasiones y siempre que ha gobernado ha aplicado políticas económicas iguales a las del PP,
las que deciden en Bruselas, donde votan casi todas las veces lo mismo que el
PP; o que cambiaron juntos en un día la Constitución para anteponer el
pago de las deudas a los bancos a las necesidades de la gente. Que ambos en los
gobiernos alternativos han privatizado, han recortado los derechos laborales,
han recortado servicios sociales y prestaciones...
2- Tienen que
ponerse de acuerdo para evitar que siga gobernando el partido de la corrupción. ¿ Y no son corrupción los ERES,los fraudes de los cursos de formación...? La historia nos muestra que los dos
partidos que se han turnado hasta ahora en el gobierno han tenido las mismas
buenas relaciones con los poderes económicos, pasando por las mismas puertas giratorias de los
ministerios a los consejos de administración.
3- Es la
posibilidad del cambio, que tanto espera la mayoría social: de la ley electoral, legislación laboral,eliminación del despilfarro de administraciones y cargos públicos, transparencia, fiscalidad progresiva, justicia justa...
Pero para realizar esos cambios habría que derogar gran número de leyes que, casualmente, votaron a favor PP y PSOE en un
pasado bastante reciente.
4- El PSOE no
tiene otra alternativa si quiere sobrevivir. No hay que olvidar que muchos de
sus dirigentes, actuales y del pasado, tienen intereses personales importantes
con el sistema actual; que la militancia pinta poco; y que la historia nos dice
que los y las votantes olvidan pronto y terminan siendo fieles a las siglas de
siempre.
Y, lo más importante por desgracia, el libro de
actas del congreso y de muchos parlamento autónomos nos dice que siempre que el PSOE ha podido optar entre
gobernar con la izquierda o con otros lo ha hecho con otros (desde González con Pujol o con el PNV, hasta Susana
con Ciudadanos, pasando por Patxi López con el PP); y ahora las únicas conversaciones mantenidas
por Pedro Sánchez han sido con
Ciudadanos.
Es posible que esa
mayoría que pide el
gobierno de "las izquierdas" sea realista al modo del mayo del 68,
"pidiendo lo imposible"; pero hay que ponerse ya a trabajar para
lograrlo. El único instrumento:
una sociedad formada e informada, que se organice colectivamente para actuar y
luchar por sus derechos. Semejante mayoría social podrá elegir las
personas y los partidos que la representen y participará con ellos todo el tiempo en la
construcción del nuevo
sistema.
En estos momentos,
sin esas circunstancias, ninguna coyuntura de gobierno, aunque pueda ayudar
algo, supondrá cambios
importantes en las condiciones impuestas por el Sistema actual.
Es muy cierto que necesitamos "una sociedad formada e informada" y el no tenerla es el problema de fondo más grave de todos. Pero su formación no empezará a dar resultados hasta dentro de 10, 20 o más años y su información es otro imposible si no nos quitamos de encima la censura impuesta a los medios de comunicación y la manipulación resultante de la realidad.
ResponderEliminarEntretanto, tenemos lo que tenemos. Un PP que, a pesar de todos sus desmanes, consiguió la mayoría de votos, un PSOE como segunda fuerza parlamentaria y una IU que da sustos de muerte coqueteando con la idea de apoyar un gobierno PSOE-Ciudadanos. Nadie quiere que se repitan las elecciones porque no hay señales de que habría cambios sustanciales en los resultados.
Podemos intenta formar un gobierno donde el tradicional tirón del PSOE hacia la derecha sería controlado por la presencia de fuerzas compensatorias. ¿Insuficiente? Sin duda alguna pero la situación no da para más.
El PSOE no asusta a la Banca.
ResponderEliminarEl PSOE no asusta a la Patronal.
El PSOE no asusta al Ibex 35.
El PSOE no asusta a la Iglesia.
El PSOE no asusta al Ejército.
El PSOE no asusta a Bruselas...
El PSOE abandonó la izquierda hace 40 años.
¿Va a volver a asustar a tantos poderosos? Es decir, ¿va a volver a la izquierda? o sea, ¿va a juntarse con amistades tan "peligrosas"?
No sé las respuestas, pero las intuyo.