Juan
García Ballesteros
Presidente
del Colectivo Prometeo
Miembro del FCSM
Durante las diferentes
legislaturas habidas hasta ahora, el PSOE y el PP como perros amaestrados han
seguido el dictado de los poderosos. Han gobernado uno u otro, pero en
cuestiones “de estado” por el bien de España, se han dado la mano e incluso se
han abrazado. Han desarrollado la misma política económica. En aras de la
austeridad, han recortado derechos sociales y laborales, han privatizado las
empresas públicas, han permitido los desahucios, han modificado la Constitución
–tan sagrada- con el artículo 135 y han ido poco a poco empobreciendo a
millones de personas.
Después de las elecciones
del 20D, los socialistas han dado un
giro y han renegado de los populares. Han olvidado los muchos encuentros y
abrazos concedidos y han preferido asociarse a una nueva derecha, Ciudadanos,
que todavía no había enseñado claramente los colmillos neoliberales y clamaba
por acabar con tanta podredumbre, tanta corrupción. El PP estaba solo. La
arrogancia y prepotencia de sus años de Gobierno, sus imposiciones legislativas,
su desastrosa política social y económica, su pésima gestión de las
reivindicaciones nacionalistas y sus cientos de militantes, y el propio
partido, imputados por corrupción rechinaban tanto que incluso sus otrora
socios de Gobierno, los partidos nacionalistas vascos y catalanes, le dieron la
espalda. El PSOE perdió una oportunidad histórica para apartar del Gobierno a
Rajoy. Hubiera contado, si no se alía con esta nueva derecha, con los apoyos
suficientes para, con un programa de cambio real, ser Sánchez elegido
Presidente del Gobierno.
Las elecciones de del
26J –a pesar de toda la corrupción que impregna a los populares- han supuesto
un afianzamiento del PP a costa del partido naranja, a pesar de la abundante
subvención recibida del Ibex35, ha perdido vuelo e influencia y se ha quedado
de comparsa.
En estos cuatro últimos
meses hemos asistido–viene de largo- a una opereta bufa, cuyos protagonistas
intentan ocultar sus vergüenzas, sus mentiras, sus engaños, bajo el concepto “por
el bien de España”, pero la suya, la de los poderosos. Así tanto el PP como
Ciudadanos han intentado arreglar sus escasas diferencias con sillones –ya
habían conseguido copar la mesa del Congreso- y una palabrería de cambios que supondrían
un lavado de cara de este sistema corruptos para seguir hundiendo en el hambre,
la miseria, la exclusión y la desesperanza a millones de ciudadanos. Si miramos
las hemerotecas y repasamos lo que C´s decía estos meses atrás sobre el PP –
con el que va a pactar la presidencia del Gobierno- pensaríamos que no es
posible tanta hipocresía, tanta desvergüenza, tanto cinismo en afirmaciones tan
categóricas como“hablaré
con el PP pero no con quien cobró de Bárcenas”, “nunca apoyaré al PP a la hora de formar Gobierno si Mariano
Rajoy sigue como líder”.C’s, estos mariachis del Ibex35, no
tiene ningún empacho en tragarse sus palabras, siempre y cuando, al
engullirlas, vengan repletas de lo que querían, cargos y nombramientos que no
le corresponden. Por eso, cual criado fiel de su poderoso amo pepero, a su vez
lacayo fiel de las políticas neoliberales de la Troyka, se puso a sus órdenes
para convencer al PSOE y que salga de su cerrazón para aceptar que el PPodrido
forme Gobierno. Pero, este inútil, tramposode Rivera, no sabe que él nunca lo
conseguiría, que Pedro Sánchez se jugaba mucho en esta ruleta gubernamental y con
su “no es no” se impuso a esos varones gerifaltes socialistas quesiempre han
realizado las mismas tropelías que la derecha franquista que nos gobierna.
Terminada
la comedieta (salvadora de España)de esta rancia derecha con un fracaso
rotundo, a pesar de todo el apoyo económico y mediático, con un despliegue verbal
engañoso, planteándose como única posibilidad de gobierno, utilizando el
discurso del miedo que tanto resultado le ha dado en estas pasadas elecciones y
como garante de una “recuperación” y “salida de la crisis” que sólo ha
engordado los bolsillos de los poderosos. La vergüenza de este país es que todavía
haya millones de ciudadanos a los que la crisis ha hundido en la miseria, el
hambre y la exclusión que sigan apostando por un partido corrupto hasta la
médula, imputado por los muchos desmanes que ha cometido y que si sigue
gobernando de forma interina con un alarde de prepotencia autoritaria y
antidemocrática que le lleva a ignorar los acuerdos de los diputados y
ningunear a los representantes del pueblo español. Como afirma Alberto Garzón
“En cualquier país más democrático se estaría debatiendo sobre la ilegalización
del PP”.
Pedro
Sánchez no ha jugado esta última partida, no ha querido ser arbitro-comparsa
que posibilite tanta podredumbre y tanto daño a la ciudadanía. Él sabía que la
ecuación de la mayoría para formar un gobierno alternativo con Unidos-Podemos y
C´s era inviable y la opción con los nacionalistas estaba vedada por los
puritanos españolistas del PSOE. No quedaba otra opción que terceras
elecciones. Pero entonces llegó el Comité Federal, dominado por los barones, y
obligó al Secretario General a una renuncia no programada. Sin plan B, el PP se
frotaba las manos porque sabía que los tenía de rodillas. La Comisión Gestora
estaba acorralada. Como no quiere terceras elecciones (se podría quedar como el
Pasok griego), la única opción que les queda es “entregar al PP el Gobierno de
la nación”. La abstención de los diputados socialistas (ya veremos cuántos) que
se aprobará en el próximo Comité Federal, supondrá otorgar a los populares un
gobierno que no les corresponde y que actuará utilizando los decretos leyes e
ignorando todos los acuerdos que el Congreso vote en su contra. Lo que nos
viene encima es catastrófico. El PP, obediente subalterno, va a imponer las
exigenciasde la Troyka en cuanto a recortes en pensiones, privatizaciones y
nueva pérdida de derechos laborales y sociales (lo poco que queda). El PSOE con
su decisión de favorecer que gobierne un partido corrupto, será corresponsable
de todo este desastre. Los datos que ayer publicó AROPE (medidor armonizado de
pobreza y exclusión a nivel europeo) sobre España son dramáticos (Enlace: http://kaosenlared.net/el-milagro-del-ppsoe-pobreza-en-el-estado-espanol-15-datos-para-la-verguenza/). El impresentable Rajoy y su partido
corrupto han cosechado tal cúmulo de récor negativos (pobreza, paro, exclusión,
emigración, bajada de pensiones,…) para la inmensa mayoría de los españoles que
no se puede comparar con ninguna etapa anterior.
Después de
entregar el PSOE el Gobierno al PP, Unidos-Podemos queda como única fuerza
política de oposición capaz de plantarle cara al futuro Gobierno no sólo con
propuestas de cambio real en el Congreso para mejorar de las condiciones de
vida (laborales y sociales) de la ciudadanía, sino implicándose con más
amplitud y fuerza en la sociedad, involucrando a los colectivos sociales,
plataformas, mareas y sindicatos en una movilización y concienciación social
que origine un “contrapoder” capaz de transformar desde abajo las duras
estructuras que nos ha legado este estado de la transición decadente y caduco.
Enhorabuena Juan, coincidencia plena con tu artículo, y es lo que tenemos en este país y seguro que hemos hecho algo o mucho mal, la izquierda, para merecernos estos gobernantes. Además es un motivo de tesis doctoral, estudiar las motivaciones de siete millones de españoles para votar a esta gente presuntamente delincuente.
ResponderEliminarSaludos.