Fuente: Vetustideces |
José
Antonio Naz Valverde.
Profesor
de Francés
Colectivo Prometeo/FCSM.
Esta
frase como afirmación rotunda, sin la más mínima interrogante, se
difundía el lunes desde las rotativas y televisiones de las grandes
empresas comunicativas europeas. Las mismas que durante toda la
precampaña y campaña de las elecciones presidenciales francesas han
apoyado incondicionalmente al hombre señalado por todos los poderes
"serios" de Francia y de Europa para ser el presidente
necesario para mantener el orden establecido por la UE de los
banqueros y los mercaderes. Y Macron ganó, a pesar de no representar
a ningún partido, pero apoyado por los lideres de otros como
Hollande, del partido socialista, que lo prefiere al de su propio
partido. Aunque 1 de cada 4 electores no participó y el 12% de los
que lo hicieron votaron en blanco o nulo. Obtuvo el 66% de los votos
válidos frente al 34 % de su oponente. Es decir ha recibido el voto
de un tercio del censo, unos 20 millones frente a los 11 de la
señora Le Pen y 12 que no han querido elegir entre la derecha
ultraliberal y la derecha racista.
Según
estos datos habría que concluir que dos terceras partes del
electorado francés es "radical". A lo que habría que
añadir los votos "barrage " (dique) recibidos por Macron
de "radicales de izquierdas" para frenar a los "radicales
de derechas".
Pero
lo importante es que se ha evitado el peligro del radicalismo,
supongo que en la acepción de "reformas extremas",
porque no creo que toda esos magníficos analistas políticos
consideren peligroso"ir a la raíz" (la otra acepción del
término). Todos los gobiernos de la UE y las
buenas gentes pueden respirar y tranquilizarse. Macron va a continuar
las reformas "moderadas" y tan necesarias, aunque la
mayoría de la población francesa no las entienda y se haya
enfrentado a ellas en los últimos años, como: 100.000 funcionarios
menos, reformas laborales para facilitar la economía (despido libre,
contratos parciales, aumento de la edad de jubilación, rebaja de las
pensiones...),incrementar la privatización de los servicios
públicos, profundizar las políticas monetarias europeas que tanto
se han denunciado, reformas fiscales para que los ricos paguen menos
y aumento del IVA, seguir sin rechistar las decisiones de la Troika y
de los grandes bancos... En política internacional se ha evitado el
peligro de las políticas de paz y neutralidad que propugnaban los
extremistas y se afianzarán las alianzas con la OTAN y EEUU
incrementando la participación en las guerras como la de Siria, sin
necesidad de la aprobación de la ONU. Frente al racismo del Front
National contra los inmigrantes se impondrá la política de la UE,
seguir pagando a Turquía y otros países para que les impidan el
paso, rechazando el radicalismo de la France Insoumise que pretendía
considerar francesas a todas las personas que vivan en Francia.
Todo
esto y muchas más medidas profundizando en la línea de las
políticas de los gobiernos anteriores se llevarán a cabo, siempre
que el Parlamento, que debe constituirse tras las elecciones
legislativas de Junio tenga mayoría afín al recien elegido
presidente.
Conseguir
esa mayoría es ahora el trabajo intenso de todos esos poderes que
han conseguido en varios meses crear un presidente de la Republica
sin partido y sin la etiqueta de "populismo" que se guarda
para las otras formaciones. El problema es que a las elecciones
legislativas se presentan listas en las distintas demarcaciones, y
habrá que inventarse muchos candidatos y candidatas en poco tiempo,
aunque parece claro que los llamados partidos "tradicionales"
están desaparecidos y muchos de sus antiguos dirigentes engrosarán
las filas de ese movimiento, En Marche, que volverá a ser presentado
como la salvación moderada.
Está
por ver si se presentan las mismas formaciones y si consiguen
resultados semejantes a los de la primera vuelta de las
presidenciales, donde cuatro de ellas tuvieron diferencias mínimas
entre sí , rondando el 20%. Y si visto el resultado final de éstas
últimas no llegan a acuerdos entre algunas para presentarse juntas
desde el principio. En el caso de la izquierda, sumando los
resultados conseguidos por los 4 candidatos habrían sido los
primeros con diferencia, mientras que el que más consiguió,
Melenchon, no pasó a la segunda vuelta por 600.000 votos.
El
electorado francés se verá de nuevo obligado a decidir entre sus
contradicciones: apoyar los movimientos y partidos que quieren
acabar con las políticas de los últimos años, haciendo oídos
sordos a los continuos y abrumadores consejos, advertencias y
amenazas delos poderes y sus "media" sobre los peligros del
populismo radical en sus distintas vertientes; o volver a respaldar
las mismas políticas que dice rechazar, con caras y siglas nuevas,
para seguir luego combatiéndolas como vienen haciendo en los últimos
años.
¿ Porke a Lepen le votan los travajadores, parados i las zonas mas desfavorezidas de Francia?
ResponderEliminar¿ No sera porque la izkierda le a dejado ese espazio libre a la ultra derecha dejando a la clase obrera a los pies de los kavayos de una konpetenzia atroz yamada libre merkado, konpetenzia, desrregulazion, flesivilizazion i privatizazion?
En las elecciones legislativas, la gente suele votar a la formación política del nuevo presidente para darle los medios de gobernar, se dice ; también pasó así en el 2002 con las mismas circunstancias que hoy (el rechazo a Le Pen, padre, dio la mayoría a Chirac, y luego a su partido). Ahora, si el reparto se hace como en la primera vuelta, tendremos efectivamente, como dices, José, cuatro grupos con aproximadamente unos 20%.
ResponderEliminarPero ¿qué va a pasar con el partido socialista? (Valls acaba de decir que apoyará a Macron y "La république en marche")
La derecha de LR("Les Républicains")a pesar de unos tránsfugas sigue por ahora más unida para oponerse a "En marche" que considera como el PS con otro nombre.
¿Seguirán los descontentos, y entre ellos efectivamente, por las razones descritas más arriba,los obreros, a votar al "Front National"?
También hay una segunda vuelta, y entonces veremos las alianzas... o no.
¿Y si fueran capaces de unirse los cuatro grupos de izquierda?
Hasta ahora, "il est toujours permis de rêver..."
https://www.youtube.com/watch?v=bH3IuphLH6o
ResponderEliminarCualquiera diría que parecemos adivinos pero en realidad los comunistas marxistas simplemente somos honestos, dignos, valientes, inteligentes y decentes hasta más allá de la extenuación. Quien diría que en el 94 Fidel ya estuviese presagiando la cada vez mayor destrucción del trabajo asalariado-esclavo por no necesitar de tantos esclavos para los intereses de las clases dominantes, y la explotación y subordinación esclavista masiva que con cada vez mayor desdén y sin tapujo alguno se prestan los criminales capitalistas a escenificar públicamente en Europa.