jueves, 28 de noviembre de 2013

La Coartada

Juan Rivera
Colectivo Prometeo-FCSM Córdoba

       Si de verdad estamos en una crisis global de la que solo podemos salir “ con el esfuerzo de todos” -como le gusta decir a la Oligarquía dirigente y repetir como papagayos a los Borbones-, la aseveración es incompatible con el aumento del número de millonarios españoles en la primera mitad del 2013  en un 13´2% ( según el estudio elaborado por Credit Suisse).Más de 400 mil personas en nuestro país tienen una chequera tan bien surtida.
     Ergo la tan cacareada frase debe ser falsa. Aunque nos resulte difícil creer que los amantes del “ Dios, Patria y Rey”, tan apegados a los aderezos rojigualdas en pulseras, cuellos de camisa y demás atalajes, pierdan la oportunidad de demostrar a toda la sociedad hispana su patriotismo y en lugar de contribuir a la Hacienda Pública pagando impuestos en función de sus ingresos, se dediquen a evadir capitales con sociedades fantasmas ubicadas en paraísos fiscales como si fuesen unos Bárcenas cualquiera.
     Si los “ minijobs” fueran la panacea que el presidente de la CEOE Joan Rosell predica,no existirían informes de ministerios alemanes indicando que no cumplen una función de puente hacia el empleo indefinido a jornada completa ni subrayarían que los “ agraciados” con este sistema laboral tienen un futuro que pinta desastre, precariedad y pensiones no contributivas. Tampoco la Oficina Federal de Estadística ( Destatis) alertaría del espectacular incremento del número de pobres tras la implantación en más de 7 millones de personas de esos contratos con un sueldo de 400 euros al mes. Ni la Grosse Koalition CDU-SPD en ciernes anunciaría un estudio para revisar los mismos.
     Si no hubiese alternativa a los designios de la Troika ( Banco Central Europeo,Fondo Monetario Internacional y Comisión Europea) o a las locas ocurrencias de los “ gurús” del Neoliberalismo,los países de América Latina que en la década de los ochenta- noventa vivieron en sus carnes recesión,hiperinflación y endeudamiento que llevó la miseria y desesperación a millones de personas, estarían aún de rodillas ante el sistema financiero y no protagonizando una etapa de crecimiento después de atreverse a desoír las admoniciones del Pensamiento Único y apostar por un modelo alternativo.En él incluyeron la redistribución del reparto económico e impusieron límites a la voracidad insaciable de quienes quieren todo el pastel.
     En nuestro país,como no podían imponer su dominio de clase a las bravas, buscaron una Coartada: la encontraron en la Crisis.

     Al perdernos el respeto, ese 10% que controla aproximadamente el 50% de la riqueza de España o ese 1% que posee el 20%,también se ha apuntado a la moda de “recortar humillando” .Que se note quien manda.
     Por ello, una vez que nos han macerado como Sociedad en nuestro propio miedo -inyectado con los recortes en los sueldos de los funcionarios,la destrucción masiva de empleo en Banca y otros sectores antaño intocables y el ejército de 6 millones de parados- cumplimentan sin titubear la segunda parte de su estrategia: amagar con cierres de empresas y despidos para que los acogotados trabajadores ofrezcan “motu proprio” una rebaja salarial que garantice al Amo un beneficio aún mayor.
     Buscan que amoldemos nuestro comportamiento al de los internos en un campo de concentración ( el silencio, el acatamiento y la sumisión la traen leyes como la mal llamada de Seguridad Ciudadana, actualmente en cocina ). Nos aplican tácticas que ya utilizaron los nazis.
     Exterminan cualquier atisbo de resistencia. Cuentan con el esperado refuerzo de los Kapos que pese a estar también machacados por el sistema, colaboran con sus maltratadores – e incluso defienden sus medidas – a cambio de tener algunos privilegios más que los presos normales. Realizan la función de control del “ ghetto”.
     Pero se nutren especialmente de la resignación. De quienes respiramos aliviados cuando vemos que ese día son otros los llevados al matadero, sin caer que en el próximo descaste seremos nosotros quienes terminemos como muñecos rotos y otros temblorosos aliviados introducirán nuestro cadáver, despojado de dignidad, en la Trituradora de Derechos.
      El domingo pasado un entrañable amigo me brindó un ejemplo concreto de esto último. El caso no es especial y se puede estar repitiendo día sí y otro también por toda la península. Pero resulta ilustrativo: a un familiar con cerca de 40 años trabajando en una pequeña empresa lo van a despedir. Tiene 60 años y el dueño le ha advertido que si reclama derechos y una indemnización fijada hace tiempo, cierra el negocio y pone de patitas en la calle a sus otros tres compañeros diciéndoles que la culpa de que vayan al paro es suya.
     De una tacada utiliza Coartada ( “no soy yo, el negocio va mal”),represión arbitraria (“tú a la calle”), sumisión ( “ vosotros tres, si sois buenos no haréis esta Navidad el papel de Pavo” ) y además pretende aprovechar nuestras contradicciones ( “a tí te voy a despedir de todas formas, pero como sigas protestando van a caer tus compañeros” ).
    Han generado una maquinaria infernal con lavado de cerebro incluido. El culpable no es el Sistema económico que usa y tira a las personas sin mirar en ellas su condición humana. El neoliberalismo no falla. Falla el excluido porque algo habrá hecho mal para que lo arrojen del engranaje productivo. Él es culpable.
    Con la Coartada están consiguiendo el crimen perfecto: como en la Guerra Civil, víctimas cosidas a balazos son clasificadas con la etiqueta“ muerte natural”. Y los familiares solo lloran.
     Se creen impunes y nos ladran. Pero aunque perversos no son tontos. Conocen perfectamente la fisura, el talón de Aquiles de su pensamiento, de su estrategia. Saben que su cúspide está sostenida por nuestro miedo y que en el momento que la inmensa mayoría lo pierda todo el entramado se les viene abajo.
      De ahí su empeño en amedrentarnos.

2 comentarios:

  1. Por utilizar palabras de aquellos 'que a dios rogando y con el mazo dando' podemos afirmar sin temor a equivocarnos que 'justicia, señor, pero por mi casa no'

    En el ciclo de la vida ¡Qué poco han cambiado los comportamientos y las conciencias de los seres humanos a lo largo de los siglos!

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  2. Yo llego a la conclusión de que el excluido es verdaderamente el culpable, pero no él en su soledad compleja de culpabilidades achacadas, si no el colectivo y el colectivo del relevo el del futuro. Una cosa está clara ningún imperio a resistido al empuje de los ciudadanos (empleo esta palabra porque muchas revolucione sino la hicieron la clase trabajadora)unidos, es imposible. Morirían muchos más los débiles pero son muchos más, y aunque no proceda, por lo serio del tema, habría que parafrasear a Gila: ¡Pues no vamos a tener balas para todos!

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