Málaga: Carta a los compañeros de Isofotón

Miguel L. Jiménez Atencia

Coord. FCSM-Málaga

Queridos compañeros de Isofotón

    Cuando el actual gobierno del PP aprobó el Real Decreto ley 3/2012 por el que se reformaba el mercado del trabajo, fuimos muchos los que alertamos de lo que suponía esta reforma laboral. En pocas palabras, se trata, y el tiempo nos ha dado la razón, del mayor retroceso en los derechos de los trabajadores de todo el periodo democrático.

    Estamos seguros, de que muchos de vosotros nos acompañasteis en las manifestaciones que se produjeron como rechazo a este golpe de estado contra los trabajadores. Sin embargo, no es menos cierto, que muchos otros estuvisteis ausentes.

     En la pérdida de derechos que la ciudadanía en su conjunto está sufriendo, al amparo de la actual crisis-estafa, todos somos responsables. El gobierno, por ser el brazo ejecutor del verdadero poder que gobierna España y la ciudadanía por no haber sido capaz de dar una respuesta contundente que cambiase la dirección de los acontecimientos. Aún resuena en mi cabeza esa frase tan repetida por muchos de: “yo en política es que no me meto”. Bueno, pues la política nos termina llegando a todos y a vosotros, compañeros de isofotón os llega en forma de ERE.

     Este texto no pretende ser un cúmulo de frases vacuas de ánimo y apoyo. Este texto quiere, sobre todo, servir de revulsivo para que tomemos conciencia de la realidad del tipo de sociedad que “otros” están construyendo para esclavizarnos.

    Sinceramente, lo tenemos muy difícil. Durante muchos años, el poder ha estado dando pasos y consiguiendo poco a poco sus objetivos para que todo el sistema juegue a su favor. Mientras, nosotros nos hemos estado entreteniendo con el futbol :1ª división, 2ª división,3ªdivisión, copa de Europa, Copa del Rey, Copa del barrio, el baloncesto, las telenovelas, el Salvame Deluxe, etc.

      Ellos han ido colocando sus fichas sobre el tablero y ahora, que no sabemos ni cuales son nuestros verdaderos intereses, ahora que estamos ensañados en nuestro individualismo y que al vecino se le ve más como una competencia que como un compañero, nos dan el golpe de gracia en forma de reforma laboral.

Seamos sinceros, al menos con nosotros mismos.
     ¿Cuántos de vosotros se ha leído la reforma laboral? ¿Cuántos si acaso saben que ha supuesto? Si estas preguntas las hubiésemos realizado hace 6 meses, muchos me habríais contestado que para qué, que vosotros no sois abogados, que no os interesa la política, etc. Sin embargo, es en esa reforma laboral donde nacen los problemas que hoy os atormentan. La reforma laboral, en muy pocas palabras supone dos cosas:

1.- Abaratamiento del despido

2.- Reducción brutal de salarios.

     El primer punto es de lo que más se ha hablado en los medios de comunicación, ya sabeis, 20 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades como indemnización por despido improcedente. Si existe causa objetiva ( y estas causas son innumerables con la reforma) la indemnización es 0.

     Pero es el segundo punto el que se ha metido en la reforma laboral y ha pasado casi, desapercibido. Ello se ha debido a que la oposición y los sindicatos se han cegado con el tema del abaratamiento del despido, las bajas por enfermedad, la movilidad, etc. Este segundo punto, básicamente, lo que supone es que la negociación colectiva ha desaparecido. Se le permite a las empresas descolgarse de los convenios colectivos que hubiese firmado y además cuando dichos convenios cumplen y deben ser renovados, si no hay acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores el convenio no se prorroga automáticamente como hasta ahora, sino que pasamos al marco de referencia estatal. Eso, amigos de isofotón, no es otra cosas que caer en el Salario Mínimo Interprofesional. Eso son 645.30€/mes. Digo esto para aquellos que se crean a salvo del ERE porque ya le hayan prometido, desde la empresa, que ellos se quedan. Los compañeros que se queden van ha sufrir una devaluación de sus sueldos y de sus condiciones de trabajo como no han conocido antes. Esto es la nueva reforma laboral.

     Sé que este panorama es dramático y desolador, pero es la verdad y en momentos como estos qué menos que saber, aún con toda su crudeza, la situación exacta en que nos encontramos.

     La solución.... la solución pasa de forma imprescindible por que todos los compañeros de isofotón estén como una piña detrás de su comité de empresa. Es absolutamente necesario mostrar, cara a la empresa, como un núcleo compacto donde todos, repito, todos los trabajadores secunden de forma precisa las movilizaciones y estrategias planteadas por los compañeros del comité de empresa. Llegados a este punto, debemos saber que lo que está en juego es nuestro futuro y el de nuestros hijos. Los compañeros que se alineen con las posiciones de la empresa son traidores y como tales deben ser tratados. Es que yo tengo derecho a trabajar! Nos pueden decir algunos. Si, pero precisamente tiene que ser cuando el resto de tus compañeros plantean una huelga para defender su mismo derecho al trabajo. Es que únicamente miramos por nuestros intereses más particulares. Debemos de ir dándonos cuenta de que, además del interés particular, hay un interés superior que es el interés general y ese es el que debe de prevalecer.

     Para terminar, una última reflexión que me gustaría presentaros. Hoy, os encontráis solos ante este ERE. Ningún otro compañero del PTA os va a apoyar más allá de un “animo!!”. Durante años hemos vivido en el individualismo y ahora nos están despedazando poco a poco, empresa a empresa. ¿Dónde estuvimos nosotros con los EREs del Grupo Novasoft, de A Novo o de Raytheon Elcan?, por poner solo algunos ejemplos cercanos. ¿Los apoyamos en sus manifestaciones y acciones de protestas? Por todo ello no volvamos a caer en los mismos errores. Es necesario que el comité de empresa entre en contacto de forma inmediata con los comités de empresa que hoy por hoy están en lucha ( iberia-málaga, limasa, etc). Es necesario hacer un frente común y hacer realidad esa máxima de que “ si tocan a uno, nos tocan a todos”. Este ERE pasará pero las familias de los compañeros de nuestra empresa y de las demás seguirán ahí, necesitando comer todos los días y pagando la hipoteca todos los meses. Apoyemos a los compañeros en sus reivindicaciones independientemente de en qué empresa sea. Unámonos todos como uno y veréis como el miedo cambia de bando.

     Sé que este texto no es precisamente la carta tipo de apoyo institucional (venga muchachos, estamos con vosotros, ánimo, bla, bla, bla). Sé, que algunos puede que se sientan incómodos si no ofendidos, pero lo dramático de la situación lo requiere. Es imprescindible que la totalidad de los compañeros de isofotón toméis conciencia de lo difícil de nuestra situación y de que nuestra única salida, tanto para los que puedan salir, como para los que se queden, es ser uno con vuestro comité de empresa y apoyarlo sin fisuras durante este trance.