Esta mañana nuestro querido compañero del Colectivo Prometeo, Rafael Juan, ha intervenido en el pleno municipal en su calidad de portavoz de la Acampada Dignidad.Una moción de IU ( apoyada por el resto de los grupos municipales excepto el PP- lógico, en esta ocasión la Iglesia no era la que se beneficiaría del uso de una propiedad municipal-) solicitaba la cesión del Rey Heredia a la asociación " Casa de la Ciudadanía" que está compuesta entre otros colectivos por el Consejo de Distrito y la asociación " Colectivo Dignidad".
Los ultraclericales en solitario se mantuvieron en sus posturas " negacionistas".Siguen sordos ante las reivindicaciones populares. Ya lo han evidenciado en el vallado del Balcón del Guadalquivir,Velá de la Fuensanta, inmatriculaciones...
Afortunadamente les queda poco tiempo para seguir ejercitando la prepotencia chulesca. Reproducimos a continuación la intervención de Rafael Juan:
"Durante
dos años, los colectivos sociales del Distrito Sur solicitaron a
este Ayuntamiento la cesión del Colegio de Educación Infantil Rey
Heredia mientras se reformaba la antigua Escuela de Magisterio y se
llevaba a cabo o no lo contemplado en el PGOU vigente. Peticiones
hechas desde la necesidad, con el respeto a la legalidad, a la que al
Sr. Alcalde alude siempre. Ninguna de esas peticiones tuvo nunca
respuesta negativa ni positiva, haciendo uso del silencio o desprecio
administrativo. ¿Qué les hubiera costado haber dicho que tenían
otro proyecto para el colegio y ofrecer otra alternativa? ¿Escondían
algo inconfesable?
La
Acampada Dignidad, cuyo objetivo reivindicativo era denunciar por los
barrios de Córdoba las políticas de recortes, decidió dar un golpe
en la mesa, que no en la puerta como ha quedado demostrado por la
policía y la justicia, y decir ¡basta!
Nuestra
reivindicación, desde el principio, fue la cesión de forma
inmediata. La Acampada Dignidad nunca quiso, ni quiere, el colegio
para ella. La acción llevada a cabo terminará el día en que el
Ayuntamiento entregue las llaves, tras producirse la cesión efectiva
al Consejo de Distrito Sur, asegurando la continuidad de las
actividades que se llevan a cabo. Ese día, la Acampada Dignidad se
irá, dando el testigo al Consejo de Distrito a través de la
Asociación creada al efecto.
Desde
el principio de la ocupación, el gobierno municipal, en vez de hacer
lo posible por llegar a una solución, inició una persecución por
la vía legal, con medidas inhumanas y sin intentar el diálogo. A
pesar de que el Sr. Alcalde ha dicho recientemente que no hemos
admitido negociaciones, lo cierto es que él mismo ha dicho
repetidamente que con nosotros no había nada que negociar. Y lo ha
demostrado hasta el esperpento.
Una
invitación a una cerveza informal, “sin que nos hiciéramos
ilusiones de nada y sin que se pudiera hacer pública”, fue anulada
por el Sr. Torrico porque el día de antes fuimos a protestar a la
ministra Ana Pastor, en su visita a Córdoba, por la reforma de las
pensiones. También parece que debíamos pagar nuestra protesta ante
el mitin del entonces candidato del PP, Sr. Cañete, en la campaña
electoral de las elecciones europeas de mayo.
La
recurrente alusión a la legalidad se le quedó en mayo al Sr.
Alcalde algo resquebrajada, ya que la Audiencia Provincial le dijo
que no había lugar al desalojo cautelar. También se le debilita
cuando su homónimo de Granada, en un claro y, en nuestra opinión,
loable acto de rebeldía, decomisa locales y solares a la Junta de
Andalucía porque ésta le debe, en concepto de transferencia de
impuestos, 4,8 millones de euros.
Porque,
según declaró el concejal de Economía del Ayuntamiento de Granada
a ABC el pasado día 10 de octubre:
La
advertencia del ayuntamiento ha sido reiterada a la Junta de
Andalucía en los últimos años por lo que para «pagar
de una vez por todas»,
se ha optado por la opción del embargo.
Parece
ser, pues, que, ante una necesidad y una injusticia, hay que hacer
algo.
Tras
un año, el Centro Social Rey Heredia es, con seguridad, el lugar
público con más vida de Córdoba. Ha sido rehabilitado, con arreglo
y pintura de paredes, techos, patio.
Todos
los días comen allí 100 personas. Ustedes, sin embargo, nos
denunciaron ante Sanidad en junio, pidiendo el cierre de la cocina,
porque sabían que no teníamos agua corriente porque usted, Sr.
Alcalde, cortó el suministro. Y ya sabe usted y toda la ciudad que
ése es el único problema que tiene la cocina del Rey Heredia, el
corte del agua.
Admiramos
su interés por la salud de la gente en este caso, aunque vemos con
sorpresa como ha puesto en peligro las vidas de miles de personas
siendo permisivo, según la legalidad, la misma que usted exige, en
la Plaza de Toros.
En
el Rey Heredia, l@s niñ@s del barrio han vuelto hace unos días a
las clases de apoyo. Se dan clases de informática, música, francés,
alemán, inglés. Una radio comunitaria emite por internet.
La
biblioteca sigue poniendo a disposición de la gente miles de libros
y unas instalaciones limpias y tranquilas para el estudio. Más de
cien colectivos lo usan para reuniones, talleres, conferencias, etc.
Y
muchísimas más actividades que Córdoba entera ya conoce y
reconoce, salvo aquell@s que tienen que hacer el feo trabajo de negar
una realidad que España entera ha visto en decenas de ocasiones por
televisión.
En
este año, las excusas del gobierno municipal a la hora de llegar a
un acuerdo han sido variadas y peregrinas.
Primero
decían que no podían, por ley, invertir en un edificio que el PGOU
contempla derribar. Pero en noviembre de 2013, estando ya allí la
Acampada Dignidad, llegó un arquitecto del Ayuntamiento a tomar
medidas para un proyecto que tenía encargado para techar el patio y
arreglar los tejados. Primera mentira.
Más
tarde se aludió a la falta de interlocución, porque éramos
“anarcoides” que entrábamos y salíamos según nos apetecía.
También sabía el Sr. Alcalde que mentía, pues desde los primeros
días tenía el teléfono de este portavoz, que ya ejercía entonces
como tal las 24 horas.
El
Ayuntamiento empieza, por fin, en mayo, a tener contactos con el
Consejo de Distrito, al que le entregan un documento “fantasma”
en el que expresan la posibilidad de ceder el colegio en junio de
2013. Si eso fue así, ¿por qué no lo sacaron hasta mayo de 2014?
¿Por qué no dijeron con urgencia, el día después de la ocupación:
señor@s, ustedes se equivocan, ¡si ya estamos en ello!? Tercera
mentira.
Por
último, el problema era la necesidad de un ente jurídico, del que
carecía el Consejo de Distrito, para recibir la cesión, así como
un plan de usos y un plan económico para justificar las subvenciones
que el Sr. Alcalde ofreció para pagar gastos de agua, luz, obras,
etc.
Todos
esos problemas están resueltos, incluido el económico, pues ya han
anunciado que han cambiado de opinión y no van a pagar nada.
Suponemos que se trata de una nueva decisión política que afectará
a los muchos colectivos, sociales y no sociales, a los que este
ayuntamiento le ofrece subvenciones de dinero público para pagar
actividades privadas. En ese caso, recibirían nuestro aplauso, pues
compartiríamos esa decisión, que, además de evitar el despilfarro
de dinero público, también evitaría los clientelismos y los pagos
de favores.
Ahora,
cuando todo podía estar ya arreglado, dice el Sr. Alcalde que el
problema es que la Acampada Dignidad tiene que irse antes de la
cesión. Porque, según dice usted, los técnicos tienen que entrar
antes para valorar el estado del edificio. Y dice que es algo de
sentido común. Para usted, claro. Porque, por el contrario, no hay
ninguna norma que exija el desalojo previo. Cuarta mentira.
Inmediatamente
todas las partes afectadas ya le han dicho al gobierno municipal que
eso no se va a producir. Porque, es lo contrario al sentido común.
Primero porque eso supondría, en el caso de que cumplieran su
palabra (cosa que, sinceramente, dudamos muchísimo) meses de cierre
del centro.
Mientras
van los técnicos, hacen el informe, se lo trasladan al Ayuntamiento,
y ustedes toman una decisión, puede pasar que ya no estén ustedes
en el gobierno.
¿Nos
pueden decir qué hacen las personas que usan el centro para comer,
estudiar, relacionarse, debatir, organizarse, etc. en ese tiempo?
Imaginamos la respuesta: les importa bien poco.
Durante
este año, ya han estado técnicos del Ayuntamiento dentro del
edificio, y, si tienen que volver a hacer un análisis de su estado,
será para nosotr@s una satisfacción y una alegría poder
demostrarles como, algo que estaba en derrumbe, hemos conseguido
arreglarlo a través de la solidaridad, la autogestión y el apoyo
mutuo.
Seguro
que los técnicos preferirán ver el Rey Heredia en vez de la antigua
cárcel, que, por seguir sin el uso solicitado por l@s vecin@s, ya
nos ha costado 200.000€ arreglarla. O el pabellón deportivo de
Fidiana. O la escuela municipal Félix Ortega. O tantísimos espacios
de titularidad pública que se caen al suelo en vez de poder tener un
uso por parte de los ciudadanos.
Cuando
alguien comete un error, se equivoca por algún motivo, evidentemente
tiene un coste. Sobre todo en el caso en que ese error se comete en
nombre de una ciudad entera.
Usted,
Sr. Nieto, cometió el error de ni siquiera contestar a las
peticiones de los colectivos del Distrito Sur durante dos años. Y,
en este último año ha podido arreglarlo, saliendo de una manera
airosa del problema. Su empecinamiento le ha llevado a tener que
arreglar el entuerto justo antes de unas elecciones municipales a las
que, a pesar de sus promesas, parece que volverá a concurrir.
Pero
aún está a tiempo de demostrar que, además de mirar hacia otro
lado ante la legalidad en los casos de inmatriculación, o ceder
terrenos públicos a entidades con ánimo de lucro (aunque usted
mismo les diga como camuflarlo) le importa que se mantenga la
actividad que se hace en el Rey Heredia, que el juez calificó como
“loable” y usted como “gran labor social”.
Por
supuesto que para nosotr@s la cesión será una gran victoria.
¡Faltaría más! De hecho, pase lo pase, lo conseguido en este año
ya es una victoria. Pero hay muchas maneras de demostrar también que
el arreglar un fallo no es una derrota. Y para eso hace falta
predisposición al entendimiento, capacidad de negociación.
Por
favor, no mareen más la perdiz. L@s vecin@s del Distrito ya les han
dicho claramente qué quieren que pase con el Rey Heredia mientras se
aplica el PGOU o no. No salgan con nuevas ocurrencias tan peregrinas
como que van a tirar solo el colegio. Aunque no se lo crean, no se
trata de exhibir músculo. Se trata de demostrar sensibilidad,
comprensión y cabeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario