viernes, 23 de febrero de 2024
jueves, 22 de febrero de 2024
martes, 20 de febrero de 2024
Entreguismo
Colectivo Prometeo
lunes, 19 de febrero de 2024
Galicia Canibal
Si tuviésemos que buscar una
película que calque lo que le ha pasado a la Izquierda Gallega no nacionalista
y no PSOE en las elecciones celebradas ayer domingo 18 de febrero ésta sería “La
Guerra de los Rose”. Eso sí, cambiando la banda sonora por el “Galicia Canibal”
de Os Resentidos.
Para que todos salgamos al final - una vez conocidos
los resultados- en plan Bollywood, es decir, entonando a coro y con gafas
negras pese a la noche cerrada el “Fai un sol de carallo”
Quien no se consuela…
Los datos no dejan margen para la
duda: con una participación del 67%, 18 puntos por encima de las últimas (2020,
48.96%) la Derecha ha obtenido el 50.6% de los votos emitidos y 41 escaños, 40
para el PP (que recoge 700.491 de los 748.916 votos de esa franja
ideológica, el 47.4%) y 1 (1% y 15.312 votos) para Democracia Ourensana.
La Izquierda alcanza el 47.8%
siendo la gran beneficiada la nacionalista, con un BNG que incrementa en 150
mil votos su apoyo respecto a las pasadas elecciones, logra 467.074 votos y pasa al 31,6%
subiendo 6 escaños.
El problema es que el crecimiento
lo hace a costa de sus “aliados”, sin rascar nada de la otra trinchera, que,
aunque pierde un escaño suma más votos y gana con holgura en todas las
provincias (aunque es cierto que en Pontevedra es mayoritario, si incluimos al PSOE,
el voto a la Izquierda)Visto así , lo de “victoria pírrica” tampoco
sería un concepto a desdeñar.
Y si nos vamos a los resultados
obtenidos por quienes teóricamente representan nuestro espacio casi es mejor que
vengamos llorados de casa. Sumar ha sacado 28,171 votos el 1.9% y Podemos
3.854, el 0.3%, es decir, un 2.2% en total.
Unidos hubieran empatado el
resultado de Vox , aunque aún así la ultraderecha nos hubiera superado por unos centenares de sufragios. Si comparamos
con el resultado de las generales (178.691 y 11.11%), se han quedado en el
camino 5 de cada 6 apoyos de Sumar-Podemos.
Si nos vamos a las pasadas autonómicas, la mitad (51.223 y el 3.9%).
Continuando con el recordatorio
de grupos musicales gallegos, todo un tributo a Siniestro Total. Aunque en la
precampaña lo que más ha sonado entre los dirigentes de Sumar y Podemos han
sido los Golpes Bajos.
Visto lo visto, debería quedarnos claro lo que se repite en los análisis de este blog una y otra vez:
sábado, 17 de febrero de 2024
Entrevista a nuestro compañero José Antonio Naz, presidente de Andalucía Laica
Aquí os dejamos el enlace a la entrevista realizada por Diario 16 a José Antonio Naz, actual presidente de Andalucía Laica y miembro desde su constitución del Colectivo Prometeo
jueves, 15 de febrero de 2024
Colectivo Prometeo: Aviso
lunes, 12 de febrero de 2024
¿Para cuando la libertad de conciencia?
Fuente:Laicismo.org |
jueves, 8 de febrero de 2024
Sobre el lenguaje progre, la clase media y la confusión
El Bosco: Extracción de la piedra de la locura (detalle) |
Colectivo Prometeo
Reza uno de los titulares del diario digital Público (edición del martes 6 de febrero) lo siguiente: “La casta está de fiesta y la factura la paga el pueblo; Milei, a punto de destruir la clase media argentina”.
Leído así, yo digo: bien por Milei.
Pero como los tiempos no están para confiar en la prensa, sea del supuesto color que sea; y menos aún en sus titulares, habida cuenta de las ignorancias benditas o mezquinas que se usan como moneda de cambio, considero oportuno ahondar un poco más en lo que ahí se afirma.
Digo esto porque de una primera lectura de tal titular -también del desarrollo de la noticia- lo que se desprende, al menos visto a los ojos de un marxistas irredento como es un servidor, es el marasmo de confusión progre que el plumillas progre de turno, en su bienintencionada ignorancia, deja caer tan pancho.
“Milei se carga la clase media argentina”. Bendito Milei, vuelvo a sostener.
Pero dejemos el énfasis y vayamos un poco más allá del efectismo; y comencemos entonces con la negación del hecho consumado: la existencia de tal clase media; una entelequia tan linda como un unicornio con alas, la libertad o la meritocracia, que se nos ha puesto por delante como un concepto tan fatuo que se pincha cuando se roza como pompa de jabón. Bien construido y mejor pensado, constituye otra engañifa exquisita del sistema que perseguía, y lo ha conseguido, desclasar a esa parte de la clase trabajadora que alcanzó, activa o pasivamente, a materializar parte de sus aspiraciones a través de la conquista de derechos, o bien, como hecho más frecuente, a través de la adquisición directa de estos derechos como remanente de las luchas obreras emprendidas en el pasado.
lunes, 5 de febrero de 2024
sábado, 3 de febrero de 2024
Otras visiones , otras lecturas: "El extraño olor a incienso de Yolanda Díaz"
Antonio Gómez Movellán
Europa Laica
viernes, 2 de febrero de 2024
Una humilde propuesta (a propósito de la escuela concertada)
jueves, 1 de febrero de 2024
El Progreso
Remedios Copa
Colectivo Prometeo
El progreso es uno de
esos temas que se menciona a diario y que a su vez, como dice Laura Vicente, el
término progresista se ha convertido en el cajón de sastre dónde se mete de
todo, desde un gobierno, un partido, o una propuesta.
Cuando el progresismo, “ideología y doctrina
que defiende y busca el desarrollo y el progreso de la sociedad en todos los
ámbitos, y especialmente en el político social”, toma la terminación –ista y el relato del
planteamiento de que la sociedad humana era pobre material y moralmente antes
de que la comunidad humana alcanzara el progreso técnico que la condujo del
estado salvaje al civilizado pasa a la política se distorsiona al identificar
progresista con “ser de izquierdas”. Ante esta consideración, Corcuff habla de que la “muerte cerebral de la izquierda”
pudiera ser la causa insensata de
auto-eliminarse como izquierda para meterse en el cajón de sastre del
progresismo.
La izquierda continúa reivindicando su creencia en el progreso pese a que se está produciendo paulatinamente en los últimos años una desintegración del marco de referencia que se basaba en la creencia de que el progreso y mejora de la humanidad estaba garantizado en el tiempo de forma acumulativa generación tras generación. Esa idea ha sido uno de los grandes errores de la izquierda del siglo pasado. Una creencia de evolucionismo y progreso que la realidad se está encargando de desmentir sistemáticamente. Aún así, las fuerzas “progresistas” siguen ancladas en el pasado.