viernes, 10 de enero de 2025

Apocalípticos...pero Sumisos

 


Bases USA en el mundo




Juan Rivera
Colectivo Prometeo

¿ Te imaginas lo que estarían pregonando los medios de difusión de todo el mundo a estas horas del gobernante, da igual el país, que hubiera dicho las sandeces que nos ha regalado los últimos días  Donald Trump sobre Groenlandia, Canadá, Panamá o México?.

Y ya puestos: piensa en el griterío universal si la frase hubiera salido de un jerarca chino o ruso. Tocarían a rebato para "defender las esencias democráticas en peligro".

En cambio nos hemos encontrado un silencio atronador o, como mucho, unas frases pronunciadas con la boca chica quitándole hierro al asunto y rebajando los grados hasta convertir la propuesta de Trump en un chascarrillo entre amiguetes que incluso hace gracia, mientras se le disculpa: " cosas de Donald, que le vamos a hacer".

Pero el próximo presidente USA se ha limitado a poner sobre la mesa una propuesta clara de intervención político-militar que no tiene nada que envidiar a las formuladas en la Historia Antigua por Roma. Parte de una base inamovible: los intereses imperialistas de Estados Unidos están muy por encima de cualquier Derecho Internacional, por ello no ve contradicción alguna en imponer la voluntad de Washington aún a costa de pisotear al país afectado, por muy aliado que este sea.

Y además ocultando datos como en el caso de Groenlandia. Lo dibujan como territorio virgen de presencia estadounidense para obviar que desde 1941 tienen allí bases militares y aún en nuestros días controlan la de Thule.

La fórmula de "adquirir la isla"  también es añeja: se enmarca dentro de la táctica  tradicional de EE.UU. cuando quiere adueñarse de territorio ajeno.

Si te gusta la historia ya sabes que el intento estadounidense para "comprar " Cuba fue  recurrente en el siglo XIX. Lo formularon los presidentes Monroe en la década del los 20 ("la adquisición más interesante para nuestro sistema de Estado"),Martin van Buren en 1836, James Knox en 1848, Ulysses D.Grant en 1869 o William McKinley en 1897.

Y  también sabes como terminó el cuento al no conseguirlo: con la guerra de 1898 para "liberar a los pueblos de la tiranía española". Y ya conoces cual fue el destino de dichos pueblos: Puerto Rico engullido hasta nuestros días como teórico estado libre asociado, Filipinas pasó de "virreinato" directo hasta la Segunda Guerra Mundial al sometimiento de hoy y Cuba tuvo la "suerte" de ser un estado vasallo hasta la revolución castrista.

 Así se traduce en la práctica las "ganas de comprar " cuando a los estadounidenses les da por el consumismo territorial.

Que se hagan ahora estas disparatadas propuestas ( p.e. "Canadá 51 Estado de la Unión"), hace unos años impensables, tiene mucho que ver con el  clima político al que se está abonando Occidente. Los "gobiernos de magnates o "Ceos" que se están fraguando han conseguido el apoyo de amplias capas de la población, que  mantienen un pensamiento apocalíptico -donde debería imponerse la cordura- mientras que a la vez se muestran totalmente sumisas al poderoso. Sin ver en ello contradicción alguna.

Son las mismas personas que creen a pies juntillas que los gobiernos mandan a aviones a fumigar con productos químicos ("chemtrails") para provocar la sequía, que la tierra es plana o que Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza, mientras niegan con vehemencia el cambio climático o la evolución de las especies.

Son también quienes en nuestro país se rasgan las vestiduras viendo una blasfemia imperdonable, un ataque frontal a las "esencias católicas"  mostrar una inocente caricatura de la vaquilla de Gran Prix durante las campanadas de TVE pero a la vez asumen con absoluta normalidad que en la cabalgata de los Reyes Magos de Sevilla atestada de niños,, en teoría también un acto con componente religioso, se coree un "Pedro Sánchez hijo de puta" porque ahí lo único que se pone sobre la mesa es el derecho a expresarse libremente. El mismo que no conceden a quienes no piensan como ellos.

Son los que gritan "Se quieren cargar la Navidad y al niño Jesús" mientras huelen a un "mena" ( dicho con desprecio para deshumanizar al definido) a mil kilómetros de distancia, pero tienen el olfato atascado para detectar el genocidio que se está cometiendo delante de sus narices, con decenas de miles de niños muertos, en el mismo lugar que -según ellos- vio nacer a ese Jesús al que tanto adoran.

Son en definitiva quienes piden que desaparezca el Estado porque amenaza su libertad y quiere controlar sus mentes  mientras utilizan como fuente única de información el magma pestilente creado por Elon Musk y sus imitadores a los que conceden una credibilidad similar a la Biblia. Palabra de Dios.

Parece ser que en los últimos días algunos gobiernos como el alemán o el británico han empezado a darse cuenta del peligro que implica tener las redes sociales y medios de difusión al servicio de la ultraderecha. En el horizonte se perfila un nazismo que no necesita para uniformar a la población trajes de las SS diseñados por Hugo Boss desfilando al paso de oca,  pues les basta con falsos mensajes a los móviles. Como si estuviéramos representando el " Ensayo sobre la ceguera" de Saramago, está aflorando la parte más podrida de la sociedad y ,con el egoísmo por bandera, amenaza arrasarnos.

El problema principal  con el que nos encontramos ante la repetición del cáncer que ya carcomió a la sociedad en los años 20 y 30 del pasado siglo y provocó la matanza más grande de seres humanos entre 1939-45, es que, a diferencia de aquel momento donde había un pensamiento de izquierdas organizado dispuesto a resistir y combatir, esta vez actuamos como pollos sin cabeza. Cada uno  hacemos la guerra por nuestra cuenta, anteponiendo las rencillas internas a una lectura de la situación global que implicaría relegar lo accesorio ante lo esencial.

No estamos haciendo desde la Izquierda, a mi corto entender, la lectura correcta. Es tiempo de buscar complicidades y uniones para presentar una alternativa global que poner sobre la mesa e impugne a los profetas del Apocalipsis. Para que no siga extendiéndose la idea de que tal alternativa no existe y debemos conformarnos con un  "esto es lo que hay".

Porque  como te entretengas mirando a los sumisos apocalípticos los verás esperando el fin del mundo de rodillas y aliviando al amo. Aunque con la boca llena no se les escuche con claridad el "Sí, bwana". Y la verdad con artrosis y dolores en las articulaciones  a esta edad no esta uno por la labor de agacharse e imitarlos. 

Es mejor, más práctico y menos cansino lo de  preferir quedarnos de pie a vivir de rodillas.

 



2 comentarios:

PLUS 3D - Antonio Cebrián dijo...

Genial, Juan. Tal cual suscribo lo dicho

Antonio Pintor Alvarez dijo...

Totalmente de acuerdo Juan, aunque me temo que seguiremos distraídos.