viernes, 13 de septiembre de 2024

El Bien Común

 

Ambrogio Lorenzetti: Alegoría del Buen Gobierno


Remedios Copa
Colectivo Prometeo

Para hablar con propiedad del “bien común” es preciso acotar ciertos matices y desde luego será difícil hacerlo correctamente sin tener en cuenta también “los bienes de lo común”.

Entre los muchos sentidos que se ha dado al término “bien común” tenemos diferentes enfoques desde los campos de la política, la filosofía social, el derecho y también la economía. En general podemos decir que se trata de algo que es beneficioso para toda la comunidad o para la sociedad en su conjunto. Se entiende que responde al interés público en contraposición al bien privado e interés particular; por esa razón entiendo que difícilmente se puede hablar de bien común sin tener en cuenta el uso que se haga de los bienes comunes porque existen entre ambos conceptos muchas ligazones, sobre todo cuando entra en juego la economía y el paradigma en el que se desarrolle y los poderes que la controlen.

Con el concepto de bien común se ha relacionado a lo largo de la historia a los bienes materiales e inmateriales que no se circunscriben a una persona sino que se remiten a todos y cada uno de los miembros de la sociedad. Según Platón, por ser un bien de todos, no puede ser considerado un bien de la mayoría puesto que su esencia consiste en que todos los miembros de esa sociedad lo disfruten. Aristóteles también abordó el bien común e hizo referencia a su relación con los gobernantes.

Desde el punto de vista de la economía, también lo aborda el premio Nobel de Economía, Jean Tirole, en su libro “La economía del bien común”, aunque lo deriva a la referencia de la legislación y las normas sociales que a través de ella se puedan imponer a los ciudadanos en una economía de mercado; una economía en la que el consumidor es casi siempre la víctima de quienes esquilman los bienes comunes y no el sujeto del bien común como tal.

Ninguna de las teorías económicas da una verdadera respuesta ética ni eficaz a los principios del bien común y al uso de los bienes del común. Adam Smith, en “La riqueza de las naciones”, aprovecha la búsqueda del interés personal para obtener eficacia económica. Arthur Pigout, autor de “La economía del bienestar” introdujo en 1920 el concepto de “quien contamina Paga”, tratando de derivar del Estado liberal a los actores económicos la responsabilidad y solidaridad. Y ya sabemos cómo termina la aplicación de esas normas y a qué ha conducido.

martes, 10 de septiembre de 2024

8 de septiembre: La Extremadura del Poder




 Fuente: El Salto

Manuel Cañada


Hace tres años, en la tarde del 8 de septiembre, fallecía Juan Carlos Sobrino Tardío, al que todos conocíamos en Mérida por su apodo, El Cuco. Murió ahogado en el río Guadiana, a la edad de 53 años. El Cuco vivía en la barriada de San Antonio, el Barrio Bizcocho en la jerga popular, llamado así porque cuando el río se desbordaba en los años sesenta o setenta aquel enjambre de chabolas y casas humildes que los más pobres habían alzado, se impregnaban totalmente de barro. Algunas tardes de verano, cuando apretaba el calor, Cuco se bañaba en el río. Pero esta vez, le fallaron las fuerzas, el cálculo o el corazón y el aparentemente manso Guadiana se lo tragó para siempre.

El Cuco había trabajado en el campo, en la construcción y en lo que salía. Cuando estalló la crisis de 2008 estaba en Palma de Mallorca, perdió el empleo y regresó a Extremadura. Desde entonces las cosas no hicieron más que agravarse. Como le gustaba decir, no era capaz ya de conseguir trabajo “ni pagando”. El paro es, para muchas personas, la muerte psíquica, la muerte civil. Desguaza familias y vidas. Y cuando se funde con el alcohol genera una amalgama explosiva. A causa de un altercado, Cuco acabaría en prisión, donde pagó dos años y medio. “Me metieron preso porque fui con una escopeta de cartuchos en busca del karateka que me había pegado”, recordaba. Un desastre integral, un bala perdida sentenciarán, seguro, los bienpensantes, biencomidos y bien-enchufados.

Pero, ay, cuando los balas perdidas se despojan de la camisa de fuerza, del estigma que les ata, cuando se organizan y luchan. “Soy una piedra terrera/que el mundo desprecia al verme./ Soy un escombro cualquiera/pero en diciendo a romperme/doy un metal de primera”. El fandango de El Cabrero condensa con sabiduría la transformación que se produce cuando los oprimidos rompen el silencio y dicen su palabra. Cuco será una de las personas que, desde la barriada de Bellavista, empiecen a construir el primer movimiento de la renta básica en Mérida y Extremadura, del que nacería el Campamento Dignidad.

domingo, 8 de septiembre de 2024

Nuestros esclavos

Foto: Niños mineros inicios siglo XX
                            



Remedios Copa
Colectivo Prometeo

Nuestra sociedad, para mantener su nivel de consumo y crecimiento económico continuo, tiene esclavos. La razón de la mayoría de guerras y genocidios se basa en el empeño de mantener un “crecimiento continuo” suicida e insostenible.

Es por esa razón que la rebelión y la desobediencia se han convertido en obligaciones morales para quienes todavía conserven la esencia humana. Si te preguntas por las razones que están generando movimientos sociales al respecto podemos repasar algunos ejemplos; unos esclavizan a seres humanos cuyas caras no verás delante de ti, otros afectarán a tu salud y al futuro de la vida en el planeta aunque sus efectos no siempre los vean tus ojos.

Para continuar el desarrollo infinito que este sistema capitalista extractivista necesita para sostener su paradigma ha esquilmado siempre las riquezas de los países menos desarrollados, a los que a su vez siempre impidió que tuviesen desarrollo propio porque de esa forma los grandes capitales de los países desarrollados se pueden apropiar fácilmente de lo común de esas tierras y hacerlo a un precio irrisorio. Si esos países pudiesen gestionar sus recursos en su propio beneficio, los beneficios económicos del capitalismo del llamado “primer mundo” descenderían y la sociedad “desarrollada”, mirando para otro lado, también se ha beneficiado de unas condiciones de vida que distan mucho de las que padecen los países del “tercer mundo” cuyos bienes les están siendo esquilmados.

martes, 3 de septiembre de 2024

No a la megafábrica de celulosa de Altri en Galicia

 




Una pesadilla en un espacio gallego de la Red Natura: una enorme factoría de celulosa que usará millones de litros de agua al día, verterá agua contaminada de vuelta a los ríos, emitirá gases tóxicos, pondrá en peligro los sectores primarios y requerirá que se plante mucho más eucalipto en el norte empobreciendo la biodiversidad. Hay que pararla

El problema

La empresa Altri quiere instalar una enorme factoría de celulosa lindando con la Serra do Careón, en Lugo, una Zona de Especial Conservación de la Red Natura. Es decir, una zona que por su importancia medioambiental, debe ser especialmente protegida.

Las cifras

46 millones de litros de agua extraerá al día esta megafábrica de celulosa del río Ulla. Tanto como consume toda la provincia de Lugo.

30 millones de litros al día de aguas residuales contaminadas verterá de vuelta al río Ulla. No solo abusará del agua, tan necesaria en tiempo de sequía, sino que contaminará la que queda.

75 metros de altura tendrá la chimenea que van a poner al lado del Camino de Santiago para liberar a la atmósfera azufre, óxidos de azufre, óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono y material particulado.

2,4 millones de toneladas de eucalipto llegarán a necesitar. Este aumento brutal de la demanda obligará a llenar aún más terreno gallego de este monocultivo de eucalipto que que tanto daño está haciendo a la biodiversidad del norte de la Península, y que aumenta el peligro y virulencia de los incendios en Galicia, como vemos cada año.

250 millones de euros de dinero público han pedido para su puesta en marcha. 250 millones de los fondos Next Generation que servirán para llevar al colapso a un entorno natural.



La solución es clara, rotunda y evidente: no permitirlo. Nuestro entorno natural no puede verse amenazado por otra papelera que se beneficie de convertir los recursos naturales en destrucción y miseria para los ecosistemas y las poblaciones locales.

No dejemos que ocurra. Firma la petición

Firma la Petición

En los enlaces siguientes tienes a tu disposición mucha más información sobre el tema

El Salto: Altri, a sede insostenible

Youtube:Altri, riesgos para la salud

El Diario: La histórica manifestación en Palas del Rei contra Altri

Cut Galiza: Altri a enésima expresión da política colonial en Galiza

Nos diario: O sindicato labrego pode informe sobre impacto de Altri

Galicia Press: La promotora de la celulosa Altri acumula multas por contaminación

Nos diario: Altri admite que vertirá en el río Ulla 60 mil kilos de sulfato al día