Foto: Europa Press
El fundador del Frente Cívico ‘Somos Mayoría’
(FCSM), Julio Anguita, ha afirmado este martes que en el caso Nóos, del
que se ha apartado al FCSM y que instruye el titular del Juzgado de
Instrucción número tres de Palma de Mallorca, José Castro, la defensa de
la infanta Cristina no la llevan sus abogados, sino que “la llevan el
fiscal y la Audiencia Provincial” de Palma.
En rueda de prensa, en la que ha estado acompañado por el coordinador
de la Mesa Estatal del FCSM, Ginés Fernández, y por el abogado del
FCSM, Rafael Mayoral, el que fuera líder de IU ha subrayado que “el
fiscal y la Audiencia son los auténticos defensores de la infanta” y no
“el abogado Roca”.
A ello se suma, según ha señalado Anguita, que en este procedimiento
el FCSM ha sufrido “una obstrucción sistemática”, por parte de Manos
Limpias, personada como acusación popular, y también por el fiscal y la
Audiencia de Palma, con el objetivo de que el FCSM “no pueda ejercer las
acciones a las que tiene derecho por Ley”.
Ello prueba, en opinión de Anguita, que “estamos en un sistema de
excepción”, en el que “la Ley no se cumple, y no se cumple por aquellos
que tienen que hacerla cumplir”, lo cual hay que conectarlo, según ha
argumentado, con otros casos de corrupción que se investigan en el
ámbito judicial y que afectan a PP y PSOE, para así comprender que “la
entente” entre ambos partidos, “de la que habló hace unos días el
expresidente Felipe González”, en el caso de producirse puede llevar a
“una ley de punto final” para los casos Nóos, Gürtel y el de los ERE de
Andalucía.
“Naturalmente –ha proseguido Anguita–, lo que ha ocurrido con
nosotros obedecería a esa lógica, a esa hipotética ley de punto final,
que es totalmente lógica, pues si mañana la Justicia actuara ante todo
lo que tiene, el régimen de la transición habría desaparecido, porque
muchísimas personas, excelentísimos señores, estarían en la cárcel”.
Anguita ha llegado a esta conclusión después de que el FCSM, tal y
como ha explicado su letrado, se haya quedado fuera del Caso Nóos al no
aceptar la unificación de su representación legal en el procedimiento
junto a Manos Limpias, como acusación popular, dada la “animadversión”
que dicha organización le procesa.
El abogado del FCSM, Rafael Mayoral, ha aclarado que no han recurrido
el auto del juez Castro que les conminaba a dicha unificación, aún
quedándose fuera del caso, para así evitar que una futura sentencia del
Tribunal Constitucional anulase toda la instrucción posterior a la
salida del FCSM y que ello sirviera para que “los corruptos evadan la
acción de la Justicia”, algo de lo que no quiere ser responsable el
FCSM.