Remedios Copa
Colectivo Prometeo
Las circunstancias actuales no dejan lugar a dudas; la constatación de que los riesgos que nos venían advirtiendo los científicos eran reales y que están experimentando una aceleración mucho más veloz de lo esperado, hace necesaria una divulgación urgente para la toma de conciencia social y política.
El debate es urgente y para que sea efectivo ha de estar basado en criterios científicos y en el análisis de hechos reales en los que se están materializando las amenazas, que posibilite el conocimiento de los problemas reales que se ciernen sobre el planeta y sus habitantes sin estar mediatizado, disfrazado o distorsionado por intereses ideológicos, políticos, o especulativos y financieros de las grandes corporaciones y las élites económicas.
Más allá de las guerras en la competición feroz por acaparar los últimos recursos para un escaso número de la población, dejando al resto condenado a la desigualdad, la indigencia o el exterminio, existe –si se actúa con rapidez y eficacia- la posibilidad de una serie de alternativas que podrían frenar, retrasar, o paliar las consecuencias más adversas de la escasez de recursos, la crisis climática, o la hambruna y mortandad que las consecuencias de ambas traerán consigo si no actuamos de inmediato.
Estamos en un momento crítico a partir del cual ya no habrá vuelta atrás. Si modificásemos las estrategias de desarrollo industrial, el uso de racional de los recursos escasos y finitos del planeta, cuidásemos el medioambiente y la biodiversidad, la humanidad tendría una oportunidad de salvarse y salvar el planeta, porque de lo contrario, también la especie humana corre el riesgo de extinguirse.