- La Marea Básica contra el paro y la precariedad ha solicitado al gobierno la valoración inmediata de una renta básica de cuarentena como medida para valorar en el Consejo de Ministros de mañana.
- Durante el día de hoy se están recogiendo adhesiones de organizaciones y personas individuales a través de su llamamiento (que adjuntamos a continuación).
- Afirma que el confinamiento sanitario decretado requiere medidas excepcionales que permitan contrarrestar los efectos indeseados de esta situación de emergencia sobre los sectores más precarizados y desfavorecidos.
Vivimos un momento de excepcionalidad los 47 millones de personas que habitamos este país. Se han adoptado medidas necesarias que a nadie se le escapa que suponen un sacrificio individual y colectivo que inevitablemente aporta una carga añadida a las que nuestra sociedad tenía que soportar antes de la crisis del coronavirus.
Es público y notorio que no son decenas ni centenares de miles sino millones de personas las que se encuentran en nuestra sociedad en una situación de pobreza y de precariedad que se ha visto agravada tras la reciente crisis que estalló a finales de la pasada década. Como siempre, las personas más afectadas son las más vulnerables: los niños, las mujeres, las personas dependientes. La reciente visita a España de Philip Alston, el Relator Especial de la ONU sobre pobreza extrema, ha puesto encima de la mesa que la lacra social de la pobreza y la precariedad, pese a permanecer muchas veces oculta, supone una pesada losa que una sociedad como la nuestra no se debería permitir.
Es obvio que las consecuencias de las necesarias medidas adoptadas en la lucha contra el Covid-19 no afectan a todas las personas por igual. Muchos trabajadores van a ver mermados sus ingresos y en muchas familias esto va a tener unas consecuencias dramáticas. Otras se van a encontrar con la imposibilidad material de cubrir sus mínimas necesidades de supervivencia ya que no es lo mismo poder tener unos ingresos ínfimos a través de la economía informal o del medio que sea, que dejar de tenerlos al limitarse severamente esas opciones por las evidentes constricciones a que da lugar esta situación de excepcionalidad.