viernes, 3 de abril de 2020

Córdoba en Común exige una Renta municipal urgente

  • Córdoba en Común considera que "no es justo que el súperávit se destine a la deuda bancaria cuando miles de familias se han quedado sin ingresos a causa de la crisis por el Covid-19".
  • La Renta Municipal podría aliviar la situación económica de hasta 1.200 familias cordobesas.


COMUNICADO DE PRENSA DE CÓRDOBA EN COMÚN
Córdoba, 3 abril 2020.- Ha llegado el momento de que el Ayuntamiento de Córdoba cree una renta municipal complementaria en nuestra ciudad. Una ciudad como la nuestra, que antes de esta crisis ya tenía unos indicadores sociales muy preocupantes, se va a ver abocada, cuando salgamos de esta pandemia, a una situación social desgarradora como no se ponga el foco en rescatar, esta vez, a las personas.
Córdoba en Común considera que nuestras administraciones, sean del color que sean, deben remangarse y poner toda su capacidad e inteligencia en que nadie se quede descolgado ni desamparado ni abandonado.
Y es que los ayuntamientos, a pesar de no tener capacidad legislativa, tienen un papel trascendental al ser la administración que más cerca está de las personas y la primera a la que estas acuden.
Creemos que una herramienta que puede ser muy beneficiosa para este fin, sería la creación de una renta municipal, complementaria a otras ayudas económicas de otras administraciones. Consistiría en una ayuda mensual durante un periodo mínimo de un año, con posibilidad de renovarse mientras la situación de precariedad se mantenga, a familias y personas en situación de exclusión, riesgo de estarlo o sin medios suficientes para subsistir.
Entendemos que este programa tendría que tener una dotación mínima de 5 millones de euros anuales y se tendría que buscar la manera de ir aumentándolo progresivamente.
Presupuestos municipales sin ejecutar
No estamos hablando de mucho dinero teniendo en cuenta el número de familias que pasan por dificultades, ya que la cantidad que se queda sin ejecutar en los presupuestos municipales es mucho mayor, en ocasiones han sido de más de 20 millones de euros, debido a las dificultades normativas para ejecutar el presupuesto y la falta de personal municipal.


Este programa podría alimentarse financieramente de estas cantidades que se quedan sin ejecutar y además sería una herramienta para posibilitar la ejecución del presupuesto con una alta rentabilidad social.
La legislación, salvo algunas excepciones, obliga que el superávit presupuestario se invierta en reducir la deuda con los bancos, reducción que incluso a veces lleva comisiones financieras. No nos parece ético que en los momentos en los que estamos, si hay superávit, este se lo lleven los bancos, debe ir a manos de las personas, de las familias que más lo necesiten.
Nos pueden decir que sí, que esto debería ser así, pero que estas normas deben ser cambiadas desde el gobierno, y estamos de acuerdo, pero mientras no lo hagan o mientras dure este cambio ¿qué hacemos con quienes necesitan ayuda económica?
Proponemos que para que este superávit se pueda invertir en esta renta municipal, mientras la legislación no cambie, cada área evalúe periódicamente (trimestralmente, por ejemplo) si van a poder ejecutar sus partidas presupuestarias, en caso de ver que hay cantidades que no les va a dar tiempo ejecutar se puede mandar a Pleno una modificación presupuestaria que mueva esas cantidades a la partida de la renta social municipal, y si se hiciera bien, esta partida podría superar los 10 millones de euros anuales (teniendo en cuenta lo que se deja sin ejecutar en otras áreas).
Si pusiéramos una media de 684 euros (umbral carta social europea) de ayuda por familia, esta renta podría alcanzar entre 600 y 1200 familias.
Este programa precisaría de un reglamento que dejara claro quién puede acceder a estas ayudas, las condiciones, limitaciones e incompatibilidades con otras ayudas similares. Debe dejar claro también que no se invaden competencias de otras administraciones ya que estaríamos hablando de ayudas temporales y no de pensiones o similares.

1 comentario:

Manuel dijo...

Lo que hay que crear es trabajo público, empresas públicas para atender las necesidades comunes.
¿Sopas bobas? Ninguna, ni media.
Son doblemente perniciosas.
Injustas para quien se gana con esfuerzo sus habichuelas. Como poco estas ayudas lo que estarán es devaluando el sueldo de quien de forma honrada una persona gane.
E injustas porque reafirman y promocionan la dependencia y la beneficencia como modo de vida que promueven la picardía, la vagancia, y el clasismo institucionalizado.