¿RECUERDAS TAMBIÉN EL 11-S … DE 1973?

Jarín
 

     Hay un dicho popular que expresa mejor que nada la realidad de la sociedad y la política del imperio norteamericano: “Quien siembra vientos, recoge tempestades”.

     Durante las últimas semanas, los obedientes medios de comunicación capitalistas, nos han venido bombardeando con los preparativos, medidas de seguridad ante las dudosas amenazas de posibles nuevos atentados en Estados Unidos y los homenajes a las víctimas de los criminales actos de septiembre de 2001… pero es necesario recordar también otros datos a la manipulación que con frecuencia se nos ofrecen, con la clara intención de la desinformación y la ceguera social.

      Sin que sirva de justificación a la barbarie, es necesario estudiar un poco la historia de Estados Unidos y recordar que a pesar de ser una nación joven ha intervenido en más de 350 conflictos bélicos y salvo la Guerra de Independencia, la Guerra Civil y las guerras de exterminio de la población nativa (las famosas, cinematográficas y vilipendiadas guerras indias) el resto se han desarrollado en territorios extranjeros: contra México (El Álamo) para anexionarse parte del territorio mejicano, Guerra Hispano-Americana, tras el hundimiento del Maine en Cuba, Guerra de los Bóxer, 1ª y 2ª Guerra Mundial, Corea, Vietnam, intervenciones de Panamá o Libia, ocupaciones de Haití o República Dominicana, intervenciones en golpes militares como Argentina o Chile, Guerras del Golfo, Afganistán o Irak, etc… sin embargo también es necesario recordar que salvo las internas, jamás ganaron una sola fuera de su territorio. Igualmente es necesario mencionar que es la nación de mayor gasto militar y de fabricación de armas del mundo, con bases militares en más de 70 países, entre ellos España y cárceles secretas y barcos-prisión en medio mundo, donde la tortura y la muerte es continua, vulnerando los mas elementales principios y derechos humanos.

     Sería extensísimo entrar a explicar cada uno de estos conflictos, pero de lo que no hay duda, es de que tanta acción agresiva en territorios ajenos, mas pronto que tarde traerían el odio y la venganza y en parte es algo de lo que ocurrió aquel fatídico día del 2001, donde desgraciadamente, la parte mas débil y vulnerable es la que sufrió las consecuencias: la población civil. Tampoco quiero extenderme en opiniones sobre los sucesos y los actos que el arruinado imperio ha venido desarrollando para recrear la efeméride, ya que todos los medios se han encargado de grabárnoslo con la osadía de la demonización de los autores (en otros tiempos agentes del propio gobierno americano), sin entrar a valorar tantísimas cuestiones sociales, políticas y económicas de los mismos, pero sí quiero incidir en otra fecha aniversario 40 años antes, el 11 de Septiembre de 1973 en Chile, de la que no se ha hecho el menor comentario.

     Aquel 11 de Septiembre de 1973, el general Augusto Pinochet y otros militares, iniciaron un golpe militar contra el gobierno legal y democráticamente establecido por Salvador Allende y curiosamente a horas similares a las utilizadas por los terroristas en Estados Unidos.

     A las 6´30 horas de la mañana del 11 de Septiembre se iniciaba el levantamiento, primero en Valparaíso y dos horas más tarde en el resto de Chile, por la Armada chilena, comenzando el secuestro, detención y desaparición de miles de personas relacionadas con la política, la cultura o la representación sindical, etc.

     El golpe había sido perfectamente planeado por una parte de la cúpula militar con el apoyo de la CIA y reconocidos personajes de la política norteamericana con claros intereses en el país sudamericano, como podían ser Richard Nixon, Gerald Ford, George H. W. Bush y otros personajes de grupos políticos y sociales norteamericanos.

     El golpe fue apoyado por fuerzas aéreas y navales yankies en principio y respaldado más tarde por agentes y servicios secretos durante los dieciséis años y medio que duró la dictadura. Durante este tiempo las cifras de ejecuciones, desaparecidos y torturados se estiman en unas 100.000 personas, aunque las víctimas oficiales de ejecutados y desaparecidos entre 1973 y 1990 superan las 40.280 personas.

     Es lamentable que los últimos días, solamente se haya estado hablando de aquellas infelices victimas del terrorismo que conmocionó, según algunos, en septiembre de 2001 al mundo y no se haga la mas mínima alusión a aquella otra fecha del 73 y que nos debería hacer reflexionar porqué Estados Unidos sigue metiendo sus narices en otros pueblos y otras culturas.